sexta-feira, maio 29, 2009

Juan Ramón Jiménez: La poesía, 1954



1

La poesía no es sucesiva, como la ciencia. Un poeta no continúa a otro poeta, sino que recrea, revive, aísla y cierra en sí mismo «toda» la poesía.

2

Un camino por donde, aunque uno sabe que no llegará nunca, va uno bien y seguro de que es el único y verdadero.

3

La poesía…, esta eyaculación –¡qué deleite!– del espíritu.

4

Si la poesía fuera, como algunos pretenden, una cosa precisa, inflexible, ríjida, suntuosa, llegaría a desprestijiarse entre sus dos hermanas: la pintura y la música. En la pintura, realista o romántica, el pintor fija el motivo de la naturaleza como es ella misma y lo divulga o lo fija a través de su alma, para que sea fuente de sensación.
La música es una evaporación de la vida; es también maleable, irisada y temblorosa; tesorera, podríamos llamarla. El arte no traduce, comenta. La palabra fija y concreta, como el color, como la nota, debe tender a la difusión, a la melodía, a algo que se evoque y que emocione y que, al fin, abra la fuente de nuestros sentimientos ideales.

5

NO PROFÉTICA

La poesía auténtica es siempre futura, nunca profética. Su profecía consiste precisamente en ser futura.
Y no se me diga que la poesía, futura en la espresión, puede soportar también una profecía; porque la poesía es «sólo» una unidad completa.
(Quien puede ser profético es el poeta. Pero eso es otro asunto. Y se trata en prosa hablada.)

6

ESA CHISPA

La poesía nos la trae todo el existir diario que rodea nuestro diario existir; y la hace saltar, buena chispa, el roce o el choque de las existencias encontradas. Pero, en sí, la poesía, es decir, lo que salta y lo que ilumina esa chispa a nuestra espresión no es más que lo absoluto.

7

La poesía inferior gana declamada, aumentada a los oídos, no vista. La superior pierde así; gana leída en silencio con los ojos.

8

LA SANGRE VERDE

La poesía no se renueva gritando a las señoras asustadas o crédulas que la sangre es verde; sino sorprendiendo las ideas esenciales que esa sangre, más verde o más roja, riega, fecunda y exalta.

9

COMO ESENCIA

Poesía, una sustancia que alimenta como esencia.

10

Lo objetivo –que varía en cada país– no puede ser universal. Sólo es universal el alma del hombre. Así, la poesía subjetiva es la única que llena el universo.

11

Poesía, instinto cultivado.

12

La poesía, principio y fin de todo, es indefinible. Si se pudiera definir, su definidor sería el dueño de su secreto, el dueño de ella, el verdadero, el único dios posible. Y el secreto de la poesía no lo ha sabido, no lo sabe, no lo sabrá nunca nadie, ni la poesía admite dios. Por fortuna, para Dios y para los poetas.

13

El estreno de la poesía es influir superiormente sobre el mismo poeta que la ha escrito en instantes de su ser superior; hacer de un hombre divinizado un dios frecuente.

14

La conquista de la poesía es como la del amor, que nunca sabremos si su secreto es nuestro, y contamos para siempre con la belleza y la fuerza de esa duda.

15

Sólo la creación vence el ruido de la Creación.

16

Poesía metafísica no filosófica.

17

Poesía pura no es poesía casta, sino poesía esencial.

y 18

No hay poeta más puro, es decir, auténtico, que el poeta fatal.




Juan Ramón Jiménez
(Huelva, 1881-SanJuan de Puerto Rico, 1958)
in Estética y ética estética (aforismos, 1907
-1954), 1967






5 comentários:

casa da poesia disse...

Lindo!!!...epara ti...

"Negema wangu binti"

dade amorim disse...

Um verdadeiro curso sobre poesia, Maria. Alguns itens são verdadeiros poemas em si mesmos.
Beijos

bonecadetrapos disse...

Caríssima Maria,

Não conhecia o poema. Li e reli e vou tentar "roubar" algumas destas frases (poemas em si mesmos) para a lateral do meu blog onde coloco o que me toca...

Gratíssima por este momento elevado de leitura

Saudações com estima
*___ bonecadetrapos__*

Heduardo Kiesse disse...

aprendi muito mais sobre ela, aqui!

um beijo muito nosso!

BAR DO BARDO disse...

JRJ escreveu um verdadeiro tratado.

Excelente!

Powered By Blogger

Arquivo do blogue

Acerca de mim

A minha foto
Podes entrar ; tenho as mãos para dizer o disperso canto das águas. Os meus olhos, alagados pelo grito das árvores, são lúcidos ao início do sol. Com o amor das coisas, rejubilo e lanço os braços a um rodopio doce e futuro, a uma tempestade humana. Tudo o que eu espero é sentir o elo da criação que se move, entre mim e ti, e a claridade. ____________mariagomes
Estou no Blog.com.pt

Free Site Counters



Free Site Counters